¡Qué mala suerte ha tenido el Día Internacional del Pueblo Gitano! Le ha tocado competir con la liga de campeones y el debate parlamentario sobre el derecho a decidir del pueblo catalán y, como es habitual, ha salido perdiendo.
La presencia en las portada digitales de los grandes medios de comunicación ha sido escasa. Público no ha hecho mención alguna, al igual que El Mundo, La Razón o ABC. El País se ha hecho eco del informe de Amnistía Internacional que alerta sobre el aumento del acoso en la República Checa, Francia y Grecia de la misma forma que eldiario.es, con el enlace al blog de Amnistía internacional, insertado dentro del diario, a la noticia República Checa: “A lo mejor esto es lo que pasaba en la época de Hitler”. Este último diario ya había publicado dos noticias sobre el tema gitano en Europa el 7 de abril: Los rostros de los gitanos rumanos que el nuevo primer ministro francés no quiere ver y La crisis aumenta el racismo hacia los gitanos. En el caso de El País la noticia no es fácil de encontrar. De hecho, en ninguno de los diarios ha ocupado un lugar predominante, fácil de encontrar y visible, lo cual nos remite al hecho de la invisibilidad relacionada con lo gitano.
En cuanto a la actividad de los partidos políticos en twitter, a las 12 del mediodía el PP había enlazado a un manifiesto, el PSOE había hecho un retuit e IU no había dicho ni pío. Posteriormente, el PSOE enlazó a su manifiesto por el Día Internacional del Pueblo Gitano 2014 aunque el enlace nos llevaba a una página en la que no aparecía el escrito. El manifiesto del PP es un manifiesto sin sangre, profundamente aséptico, que no denuncia las agresiones que sufre el pueblo gitano en varios países europeos ni las violaciones a los derechos humanos. El PSOE sí hace referencia al menosprecio, violencia, estigmatización y persecución que padecen los gitanos europeos y la necesidad de un Plan Integral que parta del reconocimiento de que la actual situación de desigualdad y pobreza es el resultado de las políticas discriminatorias, practicadas por los países europeos durante siglos. Más allá de estos manifiestos, los políticos han estado centrados en la consulta catalana.
Lo que más me sorprende es el silencio de Izquierda Unida. Ni en su página web ni en el twitter de sus principales políticos han hecho mención a lo gitano. De verdad, no es un capricho. Estamos hablando del mayor problema de derechos humanos en la Unión Europea y el resto de Europa. Estamos hablando de discriminación, segregación, persecución, expulsiones y asesinatos. El ideario antigitano está integrado en los programas políticos de la mayoría de los emergentes partidos de extrema derecha europeos. Lo antigitano forma parte del adn del fascismo europeo. No, no es un capricho. Por eso sorprende que Llamazares solo haya hecho un retuit, que Cayo Lara, José Luis Centella, Alberto Garzón o Willy Meyer no hayan abierto la boca en twitter, ni en la página web de IU ni, hasta lo que conozco, en cualquier medio de comunicación. En twitter les he interpelado no una, ni dos, ni tres, ni cuatro sino cinco veces sin que haya recibido ni una sola respuesta. Lo sé, estaban muy ocupados en la cuestión catalana y en la precampaña europea.
Pensé que, a lo mejor, en su programa electoral para las próximas elecciones europeas encontraría alguna mención sobre, repito, el mayor problema de derechos humanos en #Europa, así que busqué en el Bloque Democracia y Derechos Civiles, en el apartado sobre Derechos Civiles, punto dos: Por una Europa libre del fascismo. Pero no. Nada de nada. En el punto tres de este mismo apartado que hace referencia a Migraciones: por una Europa social y con derechos, sí se mencionan, de manera general, las restricciones a la libertad de movimiento, las expulsiones, la xenofobia, el racismo y la violencia. En el apartado en el que habla de La lucha contra el racismo y la xenofobia también se menciona el discurso del odio y el rechazo al otro diferente y se concreta, esta vez sí, que afecta a la población extranjera como víctima propiciatoria. Pero a los gitanos, que son la víctima propiciatoria por excelencia, no hacen referencia.
El antifascismo es también luchar contra el antigitanismo. Una organización antifascista no puede olvidar la defensa del pueblo gitano y la denuncia de las agresiones y discriminaciones que sufren. El silencio de IU es insólito.