Pasan los días y el gobierno del Estado Español permanece impasible, silencioso, como si no pasara nada. Como si la corrupción y la financiación ilegal del Partido Popular fuera pecata minuta, nada que haga tambalear la estructura de un estado. Tenemos que dejar que sea la justicia quien dictamine pero cómo podemos confiar en una justicia en la que hay elementos que son juez y parte. Una justicia en la que determinados procesos se alargan, se eternizan hasta que uno se olvida de que existen. Y no solo porque no hay recursos suficientes para sacarlos adelante sino porque no hay voluntad política y porque la política está incrustada en los martillos de algunos jueces, que golpean según la ideología. Por eso las cosas de palacio van despacio. Ganar tiempo es una virtud para Mariano Rajoy y el tiempo ha sido su gran aliado para alcanzar la presidencia del gobierno. El tiempo y saber aguantar las embestidas. Puede haber una contestación social cada vez mayor y casos de corrupción, que aparecen día sí y día también, que Rajoy se aislará en su burbuja, impermeable a lo que sucede, con la mirada fija en lo que quiere conseguir. Puede balbucear ante un micrófono pero no le tiembla la mano para seguir ahondando en la degradación social, política y económica. Esa fortaleza es considerada también una virtud. Ser sordo, ciego y mudo ante el mundo. Es la figura del padre autoritario, que alardea de una moral impecable mientras sus inmundicias morales trepan por las perneras de sus pantalones y que sabe que un buen tortazo, en el momento adecuado, es necesario para enderezar al niño ciudadano. No hay otro camino. Y a pesar de que todos sepamos que su vida no es ejemplar, el tiempo va pasando, las emociones se atemperan y la atención se distrae. Una estrategia que le ha sido muy útil en el pasado.
El Kaleidoskopio de Gabalaui KdG
Blog de opinión sobre política y derechos humanos. Creado en el año 2009 como un blog de recopilación de artículos, que permitieran ofrecer otras miradas sobre lo que sucedía en el mundo diferentes a las que ofrecen los medios generalistas, se fue transformando en estos años en una bitácora de opinión política desde la perspectiva del autor. De las miradas de otros a la mirada kaleidoskópica de Gabalaui. Sed bienvenidos.
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