La caverna de la banca

Los poderosos siempre se han destacado por la soberbia y la desvergüenza, seguros de sí mismos. Saben que son los que controlan los mandos de la maquinaria. La policía es utilizada como instrumento de represión para acallar las protestas de los súbditos, pues a sus ojos no hemos dejado de serlo en estos últimos siglos. No les ha importado cedernos algunos despojos mientras siguieran acumulando riqueza y, sobre todo, poder. Sabían que nos los podrían arrebatar cuando les diera la gana. Han creado una ficción de la democracia y del bienestar mientras seguían maniobrando para que las decisiones importantes, aquellas que afectan a sus negocios, fueran las que ellos dictaban. Y no hace falta que enseñen la patita con importantes cambios. Vale con la mínima posibilidad de cambiar una ley, como la hipotecaria de mediados del siglo 20, para que amenacen con limitar el crédito. Este es su modus operandi. El Partido Popular, la política, acepta a priori ciertos planteamientos que son rechazados posteriormente en el momento en que la banca los veta. Las decisiones de un partido político, elegido por millones de ciudadanos, son teledirigidas por la banca, en este caso, y por las grandes empresas. No desvelo ningún gran secreto pero es frustrante verlos actuar a la luz del día con tanto descaro, a pesar de las denuncias y protestas ciudadanas. La democracia para la banca es la sombra que proyectan en el muro de su caverna. Hasta que nos libremos de las cadenas.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.