Cuando unos vecinos acuden a una plaza de su barrio y se juntan para leer poesía, algo bueno está ocurriendo en ese vecindario. Cuando alguien denuncia a estas personas porque dice que están ocupando la vía pública e impidiendo el paso de los transeúntes, ¿qué es lo que está ocurriendo? Una denuncia es suficiente para que lo que es una reunión vecinal, literaria, social, pacífica, sea, o al menos se intente, disuelta. Una denuncia de una persona a la cual le molesta que estas personas se sienten y compartan las lecturas que les interesan, que se lean pequeños y grandes poemas, que inviten a otros vecinos a participar, que hablen y reflexionen, que rían, que escuchen. Una denuncia seguramente ideológica que poco tiene que ver con la existencia de molestias reales porque esas personas forman parte de una asamblea popular, de un movimiento que se denomina #15M, y que probablemente al denunciante no le gusta. Una denuncia que puede implicar una multa a unos vecinos que solo quieren que su sociedad sea más justa y democrática. Pero esto da igual, el tema es que se está ocupando la vía pública e impidiendo el libre paso de los transeúntes. Hay que recoger los libros, guardar la poesía en los bolsillos y dejar que la gente se divierta en las terrazas de la turística plaza de Santa Ana del Barrio de Las Letras en Madrid. Da mala imagen ver a unos cuantos ciudadanos leyendo.
Para algunos es mejor esto:
Noche del sábado 1 de octubre en la Pza Santa Ana
que esto:
Vecinxs de Las Letras leyendo poesía en la Pza Santa Ana
Cuestión de gustos. Yo me quedo con la última imagen. Soy así de raro y de radical.
El Kaleidoskopio de Gabalaui KdG 