José Bono, del que ya he comentado lo buen hijo que es, acusa a SORTU y a Bildu de ser cómplices de los asesinatos de ETA. Para qué comentar que estas 2 organizaciones apuestan por la vía política y democrática para defender sus ideas políticas y que rechazan de forma inequívoca y firme todo acto de violencia y terrorismo y de sus autores. Esto da igual para la derecha política y sociológica porque el enemigo no es el terrorismo sino el independentismo, la posibilidad de que ¡España! no sea una y grande. Les da igual que den pasos necesarios y fundamentales para conseguir la paz definitiva en Euskal Herria, no lo van a reconocer porque en el fondo es conceder la posibilidad que tanto temen. Los independentistas vascos serán siempre terroristas para los ultraespañoles. Jamás les concederán la categoría de demócratas.
La existencia de ETA ha tenido sus beneficios para los gobiernos del PP y del PSOE. Les ha permitido a través del miedo y de la represión mantener a raya al independentismo. Evitar que las ideas independentistas tuvieran una mayor aceptación ciudadana, manteniendo constante la tensión, la violencia y el cuasi estado de excepción en Euskal Herria. Una estrategia muy parecida a la que George Bush impuso globalmente en el mundo a raíz de los atentados del 11S. No les faltaron valentía para acabar con ETA, les faltaron ganas. Pero es más fácil llamar, de manera torticera, cómplices de terrorismo a los independentistas que asumir su responsabilidad directa en los más de 30 años de violencia en el estado español.
El Kaleidoskopio de Gabalaui KdG 
¡Si señor!
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