Nada Marafie (EFE)
Juan Carlos el Borbón ha acudido este sábado a la conmemoración del 50 aniversario de la independencia de Kuwait. Un país que en el último informe sobre desarrollo humano, que publica el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), se le puntuó con un 0 en democracia y donde hace una semana se reprimió una manifestación que reclamaba derechos de ciudadanía y mayor democracia, aparte de las denuncias por detenciones arbitrarias, torturas, tráfico de personas y homicidios extrajudiciales. A Juan Carlos todo esto le da igual. No le importa estar rodeado de personajes siniestros como Porfirio Lobo, otro de los invitados, o reírse con complicidad con el jeque Sabah Al-Ahmed Al-Jaber Al-Sabah. Es el rey de España, gracias a Franco, y hace lo que le da la gana.