La fábrica del Partido Popular es muy peculiar. Un alcalde y diputado (1) diciendo que los asesinados por el franquismo lo merecían. Un asesor (2) que viaja a Cuba a hacer negocios con la oposición y acaba matando a dos de sus integrantes. Un tesorero (3) que repartía sobres y gestionaba los sobornos recibidos por grandes empresas. Un presidente del gobierno (4) que recogía los sobres con dinero extra que estaban a su nombre. Un expresidente (5) que ponía los pies en la mesa del salón del rancho del presidente de Estados Unidos y hablaba español con acento tejano a pesar de haber nacido en Madrid. Un expresidente (6) del partido popular valenciano que dijo que él estaba en política para forrarse. O el alcalde de Valladolid (7) que se refirió a la ministra de sanidad y políticas sociales de la época en estos términos: es una chica preparadísima, hábil, discreta, que va a repartir condones a diestro y siniestro por donde quiera que vaya y que va a ser la alegría de la huerta. Yo, tengo que decir que cada vez que la veo la cara y esos morritos pienso lo mismo, pero no lo voy a contar aquí. Y el alcalde de Badalona (8) que repartía panfletos xenófobos vinculando a los gitanos rumanos con problemas de seguridad y delincuencia de la ciudad. Sin olvidar a la actual alcaldesa de Madrid (9) que en su momento comparó el matrimonio entre homosexuales con sumar manzanas y peras. También la diputada por Alicante (10) que dijo que la gente con rentas más bajas solicita ayudas públicas con las que se compran televisiones de plasma. Y una diputada por Segovia (11) que dijo que guste o no guste las mujeres que más abortan son las que menos formación tienen. O el exdiputado canario (12) que afirmó que si un perroflauta agrediera a una de sus hijas le arrancaría la cabeza. No podemos dejar de recordar al exdiputado popular gallego (13) que dijo que las leyes son como las mujeres, están para violarlas. Y, por supuesto, no podía faltar el ministro de educación (14) que decía que el interés de la educación en Cataluña es españolizar a los niños catalanes. O de nuevo el presidente del gobierno (15) que afirmó que no se puede convertir el cambio climático en el gran problema mundial. Y la secretaria general del partido (16) que comparó los escraches con el nazismo. El ministro de justicia (17) que se refirió al peligro para la salud de la madre en los casos de aborto como un pretexto. Otro ministro pero de interior (18) manifestó su rechazo al matrimonio homosexual argumentando que esta unión no garantiza la pervivencia de la especie. O la dirigente de nuevas generaciones de Vigo (19) que respeta a los homosexuales pero espera que algún día descubran su cura. Y aquella a la que llamaban la lideresa (20) que nos informaba de que Franco era bastante socialista. Y seguramente se podrían añadir decenas y decenas más pero lo inquietante es que gran parte de esta feria de los monstruos tienen responsabilidades de gobierno. Es cosa de locos.
1. Manuel J. González Capón
2. Ángel Carromero
3. Luis Bárcenas
4. Mariano Rajoy
5. José María Aznar
6. Vicente Sanz
7. Francisco Javier León de la Riva
8. Xavier Sánchez Albiol
9. Ana Botella
10. Pilar Sol
11. Beatriz Escudero
12. Sigfrid Soria
13. José Manuel Castelao Bragaña
14. José Ignacio Wert
15. Mariano Rajoy
16. María Dolores de Cospedal
17. Alberto Ruíz Gallardón
18. Jorge Fernández Díaz
19. Andrea Hermida
20. Esperanza Aguirre